Antonio Romero, director general de Caja Rural de Asturias

Quiero empezar agradeciendo a todos los clientes de Banca Patrimonial de Caja Rural de Asturias por la confianza que han depositado en nuestra Entidad. En este año de recuperación económica y social nos hemos mantenido fieles a nuestra misión de contribuir al progreso de las personas y empresas.

En este sentido, creemos que fuimos capaces de dar a nuestros clientes el soporte financiero que necesitaban. También hemos apoyado a la sociedad asturiana con más de un millón y medio de euros dedicados a iniciativas solidarias, investigación y conocimiento durante el ejercicio que termina. Pero somos conscientes de que todo es poco. El virus nos sigue poniendo a prueba y deseamos seguir estando a la altura de las circunstancias. Aprobar con buena nota sería el mejor reconocimiento al gran trabajo realizado por nuestros equipos de profesionales.

No hay duda de que estos dos últimos años han sido los más complejos de nuestra historia. La fortaleza de nuestro balance nos da la capacidad de seguir creciendo orgánicamente y  estaremos ahí, como siempre, para atender sus necesidades financieras.

Si bien nos preocupan elementos que seguimos con atención en los últimos meses (la errática evolución de la pandemia, el encarecimiento del precio de la energía, las tensiones en la cadena de suministro, la inflación asociada a estos factores,…), no debemos olvidar que sigue habiendo expectativas de importante crecimiento y recuperación.     

Con la ilusión por un cambio de tendencia que devuelva la normalidad a su espacio perdido y con mis mejores deseos, ¡Felices Fiestas!.