Es una herramienta de venta que tienen a su disposición los negocios para que sus clientes puedan realizar el pago de sus compras de manera aplazada. De esta manera, permiten acceder a un mayor número de personas a sus productos y servicios.

Aunque la oferta y los trámites se formalizan en el propio negocio, la financiación la concede realmente Caja Rural de Asturias, con la cual firmarás un contrato de crédito al consumo, en el que la compra del bien o servicio se vincula a la concesión del crédito.

Como en cualquier otro préstamo, en estos casos y antes de su concesión, la entidad debe cumplir con las mismas obligaciones que si lo otorgara directamente: evaluar su solvencia, explicar adecuadamente el tipo de operación y entregar la información precontractual, INE (Información Normalizada Europea).