El Colegio profesional de Economistas de Asturias ha presentado el informe anual del Económetro 2022, elaborado junto a la Universidad de Oviedo y con el patrocinio de Caja Rural de Asturias y PwC. A este acto ha asistido nuestra compañera Nuria Meana, responsable de marketing.
El Económetro es un indicador de confianza socioeconómico cuyo objetivo es el análisis a corto plazo de temas estructurales y de actualidad, y mediante el cual el colectivo de economistas del CEA tiene ocasión de dar a conocer su opinión sobre la situación económica del Principado de Asturias.
Abel Fernández, decano presidente del CEA, explicó que “el hecho de que el informe alcance su cuarta edición permite consolidar las comparativas de evolución anual de las variables que determinan la percepción de confianza de este colectivo”. El informe está elaborado por 291 economistas que han participado en una encuesta realizada entre el 3 de marzo y el 18 de abril de 2022.
El Económetro se estructura en dos bloques. En cuanto a las cuestiones recurrentes que se preguntan en cada edición, relativas a cómo perciben los encuestados la evolución anual de su situación económica personal y de la de Asturias, los resultados de este año, presentados por Santiago Álvarez, vocal del CEA y coordinador técnico del Económetro, muestran un Índice de confianza de -25,59 puntos, en una escala de -100 a 100, lo que trasmite una percepción global de desconfianza o pesimismo, que parece frenar la mejoría en las expectativas del colectivo constatadas en 2021 (-12,43).
En cuanto a los índices parciales, las expectativas son a su vez pesimistas, en especial respecto a la evolución anual de la situación económica de Asturias, donde casi dos de cada tres economistas afirman que la situación de la economía asturiana es peor o mucho peor que hace un año. Esta es la tendencia en la percepción de la situación económica en los propios hogares y de la capacidad de generar empleo, si bien en este último caso el pesimismo es menor que hace un año.
La expectativa de ahorro en el hogar para el próximo año, aun habiendo empeorado respecto a 2021, todavía se mantienen cercanas al equilibrio entre el optimismo y el pesimismo.
Además, el precio de la energía sigue siendo, un año más, el principal factor de competitividad de la economía asturiana según el 88%, disparándose respecto a los datos del año pasado. Otros factores clave son, por este orden: la presión fiscal, los costes salariales y las infraestructuras y comunicaciones.
Por otra parte, se analizaron las cuestiones que afectan de forma significativa a la economía asturiana en la actualidad. En concreto, en esta edición se ha preguntado sobre la duración y los efectos de la reciente subida generalizada de precios, y nos señala que el 81,8% opina que ha comenzado un periodo de inflación prolongada que obligará a cambios en la política económica.
Respecto a la implantación obligatoria del registro retributivo de plantilla en las empresas y del plan de igualdad entre las de más de 100 trabajadores, el 78,7% tiene una visión pesimista sobre estas dos medidas, opinando que constituirán una carga administrativa para las empresas sin que sirvan para mejorar la situación real de los trabajadores.
La subida del Salario Mínimo Interprofesional y cómo afecta en la creación de empleo, ha sido otra de las cuestiones planteadas, y el 67,7% de los participantes cree, con mayor o menor probabilidad, que la subida del SMI provocará una menor creación de empleo.
El Económetro 2022 también ha querido conocer la opinión acerca de las reformas de la política tributaria española, y las respuestas certifican que el 80,8% de los encuestados considera que se debería acometer una bajada de impuestos para reactivar el consumo y la inversión.
Por último, se han evaluado las consecuencias de la reforma del sistema de cotización de autónomos, con un resultado de opiniones diversas más ajustado, aunque más de la mitad (52,9%) considera que la reforma provocará que muchos de ellos contraten menos empleados para compensar el aumento de sus cuotas.
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